Vengo A Decirte Gracias || Adoracion e Intercesión

Lucas 17:11-19 (Jesús Sana A 10 Leprosos)

11 Un día, siguiendo su viaje a Jerusalén, Jesús pasaba por Samaria y Galilea. 12 Cuando estaba por entrar en un pueblo, salieron a su encuentro diez hombres enfermos de lepra. Como se habían quedado a cierta distancia, 13 gritaron:

—¡Jesús, Maestro, ten compasión de nosotros!

14 Al verlos, les dijo:

—Vayan a presentarse a los sacerdotes.

Resultó que, mientras iban de camino, quedaron limpios.

15 Uno de ellos, al verse ya sano, regresó alabando a Dios a grandes voces. 16 Cayó rostro en tierra a los pies de Jesús y le dio las gracias, no obstante que era samaritano.

17 —¿Acaso no quedaron limpios los diez? —preguntó Jesús—. ¿Dónde están los otros nueve? 18 ¿No hubo ninguno que regresara a dar gloria a Dios, excepto este extranjero? 19 Levántate y vete —le dijo al hombre—; tu fe te ha sanado.

En la vida, hay algunas palabras que enseñamos a nuestros niños a usar ... Por favor, De nada y Gracias.

Cada una de estas palabras son como las llaves. Tienen la capacidad de abrir y cerrar las puertas. Pueden cosas extraordinarias cuando se utiliza. Como padres, enseñamos a nuestros hijos desde el comienzo para empezar a utilizar estas palabras. Por ejemplo, cuando reciben un regalo de alguien, les enseñamos a decir GRACIAS. Se les muestran la gratitud hacia la persona que hizo algo por nosotros o dio un regalo.

Como padres, no hacemos las cosas para nuestros hijos, sólo para escuchar las palabras "Gracias". Lo hacemos por amor. Sin embargo, sucede algo muy especial dentro de nosotros cuando nuestros hijos reconocieron que hemos hecho algo especial para ellos, que tal vez no tuvimos que hacerlo, pero lo hicimos por amor a ellos. Y con la palabra, GRACIAS, que se mueve nuestro corazón. Algo ocurre dentro de mí, y la próxima vez que me piden que haga algo, mi corazón me recuerda la gratitud a mis hijos expresaron a mí, diciendo ... GRACIAS.

No olvidemos expresar nuestra gratitud en nuestro culto y en nuestras oraciones. Cuando lo hacemos, estoy seguro de que se va a mover el corazón del Padre.

Fue una noche llena de palabras proféticas y adoración. Desde San Rafael, Mendoza levantamos nuestras voces junto con el cielo y estableciedo en el pais un altar de adoración.  Estamos creyendo que Dios va a despertar su pueblo y traer un nuevo avivamiento sobre la nacion.

NUNCA DEJA QUE EL FUEGO SE APAGA!

Un Abrazo,
Christopher y Doriana Goins

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